El ex intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro (PJS-JxC), admitió que en su gestión al frente del municipio de la Capital se llevaron adelante obras y proyectos a través del Consorcio Metropolitano para la Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (Girsu), pero aclaró que todos estos trabajos se concretaron en el marco de las normativas vigentes. “Todo se hizo como corresponde”, aseveró el líder del PJS, en entrevista con LG Play.
El ex jefe municipal salió al cruce de las críticas formuladas por su sucesora, Rossana Chahla, y por el intendente de Yerba Buena Pablo Macchiarola (UCR-JxC) y por funcionarios del equipo de este, como el secretario de Gobierno Fernando de la Orden.
Esta semana, ambas administraciones acordaron avanzar con auditorías -una interna y otra externa- sobre el Consorcio Metropolitano, bajo el argumento de que la anterior conducción, a cargo del representante alfarista Héctor Argañaraz, fue “oscura”.
En diálogo con “Buen Día”, Alfaro sostuvo que las acusaciones en su contra “son graves, y a mí nadie me va a llevar por delante”. “Es un relato que quieren crear; en vez de estar gestionando para tapar su ineficiencia y su ineficacia”, indicó.
El ex intendente cargó contra Chahla, y afirmó que “comenzaron corriendo a los empleados” en la sede de 9 de Julio y Lavalle. “¿Cómo? (Les preguntan) si trabajaron para Alfaro. Entonces, los echan. No les dan derecho a defensa ni a sumario. Si hay ñoquis, que los corran. Pero tienen que demostrarlo. Tampoco les pueden quitar el teléfono a los empleados para ver si hablan conmigo. Eso está pasando”, añadió.
El líder del PJS también rechazó los dichos de funcionarios de Yerba Buena, según los cuales la campaña electoral de Alfaro se habría financiado a través del Consorcio Metropolitano.
“Estamos todos locos. Estamos mandando una carta documento (a De la Orden). Quiero que ratifique, porque le voy a iniciar juicio, y que me explique por qué es oscura y corrupta (mi administración). No sabe con quién se metió. El primero será él. Y después esta señora (en alusión a Chahla), que dice que siempre está apegada a las normas. No: es la primera desapegada a las normas”, enfatizó.
A continuación, pidió narrar “una anécdota” referida a la actual intendenta, “para que también se pueda dar una idea de su figura y de cómo funciona”. “Ella me habló por teléfono cuando era diputada para que yo impidiera que se abra el cajón de su padre (en el Cementerio del Oeste), para que no le saquen ADN por no sé qué problema familiar, un reconocimiento de un hijo... Yo la escuchaba, nomás, (porque) nosotros teníamos la resolución del juez (Carlos) Torino”, expresó Alfaro.
El ex candidato a vicegobernador aseguró luego que, “para congraciarse conmigo, (Chahla) me regaló este pantalón para mi cumpleaños”. Y exhibió la prenda, que había llevado en una bolsa a los estudios de LG Play.
“Nunca tuve una relación de cercanía (con la actual intendenta), siempre de gestión. Durante la pandemia. Como me estaba pidiendo cosas que no corresponden, me mandó ese pantalón con su hermana, que fue a mi casa. ¿Ahora soy yo el de la gestión oscura? Yo no tengo nada que esconder”, añadió.
En cuanto a la polémica sobre la administración del Consorcio Metropolitano, Alfaro remarcó que “si no hubiese sido por el municipio de San Miguel de Tucumán, hace 10 años habría dejado de funcionar”. “La Municipalidad de Yerba Buena en estos momentos está debiendo $240 millones, y tiene un porcentaje del 12% en el Consorcio. No nos pagaban”, indicó.
Explicó luego que, por la falta de desembolsos del resto de los socios del organismo -que se encarga de la disposición final de los residuos sólidos urbanos del Gran Tucumán-, se efectuaron gestiones ante la Casa de Gobierno, donde les respondieron que se giraban recursos a través del Pacto Social.
En esa línea, Alfaro justificó luego la decisión de efectuar obras y otros trabajos a través del Consorcio Metropolitano.
“Hicimos eso porque la ordenanza de Contabilidad lo permite, y también el Estatuto del Consorcio”, señaló. Expresó que todo se enmarcó en la facultad de “realizar actividades secundarias de la Administración Pública”. “Nosotros teníamos que tener la imaginación y la creatividad necesarias para financiar el Consorcio, para que siguiera funcionando”, sostuvo. Y recordó que la Capital “tiene pagado” su cuota parte “hasta fin de año”.
“Todo se hizo como corresponde, respetando las normas”, insistió el ex intendente.
Señaló que no sólo la restauración del Palacio de los Deportes se llevó adelante a través de este organismo. “Una obra muy grande, el canal de San Cayetano, (en) el ingreso (a la Capital), que siempre estaba sucio, lo hicimos con el consorcio; el canal que cruza todo el parque 9 de Julio, también. Para nosotros, teníamos que tener la imaginación necesaria para poder financiar, y podíamos hacer obras con ellos porque tributan menos, no tienen IVA, y a nosotros la obra nos salía mucho más barata, no nos costaba lo mismo que con una empresa particular. Entonces, sí hacíamos, y ahí financiábamos (la entidad), y todos los meses poníamos, y éramos los únicos, para sostener el Consorcio”, expresó.